Junior empató como local en la Liga Colombiana en su debut ante Deportivo Independiente Medellín en el duelo que reeditó la final del semestre anterior en Colombia.

Nuevo torneo, nuevos retos, pero los mismos problemas de siempre que hicieron que la tribuna luciera abandonada y solo habitada por 10.247 personas que querían ver la cara diferente propuesta para buscar la anhelada octava estrella.

Así, en medio de la soledad, los desafíos de la nueva temporada pronto se presentaron a los ojos de Alexis Mendoza. En tan solo 7 minutos, el refuerzo estrella para el ataque, Michael Rangel, tropezó y fue al piso tras picar por una pelota larga.

Tras un par de minutos, caminó a la zona de traslado, dialogó con el médico y fue sustituido. Junior perdía a su delantero titular, siquiera antes que este hiciera el primer remate a portería.

Rangel se fue del campo con una distensión muscular en la pierna derecha. Estará por lo menos el próximo juego por fuera de las acciones. Y se espera que sea al menos otro más.

Evidenciando la falta de alternativas en el equipo, Mendoza tuvo que meter a un resentido Roberto Ovelar, cuya recomendación fue no darle más de 20 minutos, para que manejara el ataque para  el resto de las acciones.

De allí en más, Junior tuvo la pelota en los pies, pero sin generar una clara situación de compromiso para poder irse en ventaja. Junior seguía adoleciendo de generar opciones cara a cara con el portero.

A los 20 minutos un disparo de media distancia de James Sánchez fue suficiente para romper la igualdad. Tras recuperar una pelota en la mitad, la esférica le quedó servida a  Sánchez que tomó un par de pasos de impulso para sacar un potente derechazo que se coló al ángulo izquierdo pese a la exigente volada del portero David González.

La más clara de la visita, un equipo que fue frontal y que poco inquietó al arco contrario, casi  llega tras el rebote en un tiro libre disparado por Juan David Valencia que tras estrellar en la barrera le quedó a Luis Carlos Arias que disparó  y le pegó en la pierna de un jugado Sebastián Viera que alcanzó a desviar el remate, a los 35.

Así, con la diferencia mínima en el marcador, los barranquilleros se fueron al descanso para poder plantear la posibilidad más eficaz para aumentar la ventaja y llevarse los primeros tres puntos del semestre.

La segunda mitad mostró a Junior brioso en procura de aumentar las diferencias y así poder encarar con tranquilidad el remate de las acciones.

Así, a los 55 minutos, Roberto Ovelar picó a una pelota profunda y tras percatarse de la llegada por la espalda de su compañero Vladimir Hernández, la tocó atrás para un Vladimir que llegaba de frente para sentenciar el segundo, con tan mala puntería que su tiro quedó en la pierna del portero, para salvar el peligro.

Luego de eso, el partido se hizo de trámite por momentos aburrido, pero tenso ante la pequeña diferencia en el marcador. Medellín mandó al campo a jugadores como Hernán Hechalar y Mauricio Molina para tratar de igualar las cargas y el Junior dio minutos al recién contratado Faber Cañaveral y a Yony González para resguardar su arco.

Pese a la prevenciones, Medellín encontró la forma de llegar en dos oportunidades francos a la meta de Viera. Primero a los 57, cuando Leonardo Castro se metió al área y tras eludir a los centrales, disparó a las manos de Viera en el primer palo.

Tras eso, a los 75 de compromiso, el mismo Castro se giró en el punto penal  y quedó franco a la meta rojiblanca, disparó por encima del travesaño para dejar que Junior conservara la victoria.

Sin embargo, tanto llegó el agua al cántaro que este finalmente se rompió. Era previsible. Sin refuerzos que puedan darle más envergadura al equipo, finalmente Junior terminó cediendo ante el campeón de Colombia.

Christian Marrugo quedó de frente a la media luna con la pelota en sus pies, desde donde impactó un misil de pierna derecha que se anidó contra la raíz del poste derecho de Viera, que voló sin poder hacer nada, cuando ya se jugaba el minuto 90, más 2 de adición.

Así el inicio de panorama de Junior es tan desolador como el de las tribunas de un frio Metropolitano. El grito de los fieles hinchas que asistieron, fue uno, dirigido a los directivos: la culpa es de ustedes.

Junior deberá superar este tropezón para medirse contra Patriotas en condición de visitante este jueves, en la ciudad de Tunja.